NY entra por nuestras heridas y orificios

Estamos inmersos en una gran bolsa negra
perforada por agujeros de luz:
nuestra historia es la historia del Sol,
su calor en nosotros a nivel microscópico

Los desperdicios de dios se expanden
cada vez más rápido. Su basura adopta formas
colosales y hermosas como una estrella muerta
o la distancia entre la base y cúspide
de los rascacielos del distrito financiero:
los inmensos vellos púbicos de un dios sucio,
sus uñas cortadas en forma de descampados
donde algunos hombres pequeñitos juegan
a la especulación inmobiliaria

¿Qué es más abstracto:
dios o los derivados financieros?

Debemos esconder los dedos en la tierra,
combatir el fascismo con actividades
manuales. Podar un espino. Custodiar
el amarillo de una flor silvestre.
Trasplantar geranios, abrigar
las formas más sensibles de presencia.